La antropología de la ciencia, y más exactamente, la etnometodología del trabajo científico que el Leviatán arqueológico contiene es un caso polémico. Tomando como motivo central a los arqueólogos mexicanos, sus teorías mesoamericanas, sus prácticas cotidianas, su lenguaje profesional, sus interacciones sociales y sobre todo sus etnométodos, el autor muestra cómo las ciencias están sujetas a condicionamientos sociales trascendentes.