Una de las más exitosas novelas históricas de todos los tiempos, que catapultó a Robert Graves a la fama. Escrita como una memoria autobiográfica del emperador romano Claudio (10 DC a 41 DC), este relato recrea magistralmente la vida y tiempos de la Roma imperial del siglo I, en donde el envenenamiento, la blasfemia, la traición, el incesto y la disipación eran un lugar común.