Ubicada en la segunda mitad del siglo XVII: la niña Juana de Asbaje llega a la ciudad de México y sus ojos se iluminan ante aquella urbe única en el Nuevo Mundo. Tiene acceso a la corte virreinal, pero no es lo que imagina: en el palacio recibe insultos y burlas, su inteligencia despierta admiración y odio por igual, y se organizan conjuras en su contra.