En este libro, el etnólogo, antropólogo e historiador de vocación, Samuel Villela, de nuevo- como suele hacerlo con sus investigaciones-, nos presenta una historia inédita, novedosa, aparatosa, que emana de la historia oral, popular, gráfica y entrañable de una mujer que logró su sueño y egresó a su lugar natal a dotar de imágenes a su pueblo, a sus gentes y a todos aquellos que estuvieran de paso y quisieran dejar su imagen impregnada en un negativo, en un papel de sales de plata. Sin embargo, la Revolución continuaba estallando en las entrañas de ese pueblo productor y apacible, en donde Sara Castrejón se encontró con una historia gráfica para capturar con el ojo de su cámara.