En los primeros meses de 1198 tres profesores de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Sevilla -Dº Fátima Halcón Álvarez-Ossorio, D. Francisco J. Herrera García y D. Álvaro Recio Mir- presentaron a la Comisión mixta que regula el Convenio de colaboración entre la Universidad de Sevilla y la Fundación El Monte un proyeco de investigación sobre los retablos barrocos de la provincia de Sevilla, siglos XVII y XVIII.
El objetivo es llegar a saber cuántos eran, dónde estaban ubicados, a qué cánones estéticos obedecían, qué tenían de común entre sí, cómo habían nacido y en qué condiciones llegaban a nosotros hoy.