Este estudio tiene como objeto mostrar las relaciones entre el paisaje y la literatura mexicana desde el último tercio del siglo XIX hasta mediados del siglo XX. He tratado de dar curso a las semejanzas, similitudes y analogías a partir del establecimiento de parejas de escritores que van desde Altamirano hasta Manuel Calvillo; con el propósito de apuntar no sólo las diferencias en el interior de cada movimiento, sino también aquéllas que operan como signos y muestras del cambio histórico. Por tal razón, he elegido una perspectiva temática, pues éste permite establecer relaciones más amplias y flexibles, y, al mismo tiempo, más profundas y valiosas que otras versiones, y que puede ser aplicada a los géneros, las formas y las estructuras. Además, el tema mismo de este libro, el paisaje, exhibe esa urgencia y esa necesidad de adoptar el criterio más amplio posible.