En este magistral ensayo, el autor nos revela qué nos aguarda en el acto de leer -más allá de los imperativos educativos o profesionales-: esa "anomalía" del comportamiento moderno con el que se preserva un ámbito profesional propio, que hace del silencio del lector un camino hacia la interioridad, y lo encamina hacia la reflexión y la duda que mantienen vivo el tan necesario espíritu crítico.