El trabajo de N. Maldonado Torres muestra en los pensamientos que juegan la lógica de la totalidad la insuficiencia de los diversos contenidos -Heidegger, Levinas, etc.-, en los legados de Grecia y en los de Jerusalem: una totalidad fracturada en su mismo interior que silencia la diferencia colonial, y todo lo irreductible a la burbuja Judeo/Cristiana.
Esta ilusión está hoy siendo puesta en cuestión por los mismos movimientos sociales, por intelectuales y activistas, por pensadores que habitan lenguas y vivencias otras que el griego y el latín (y en la sombra el hebreo de Levinas y de la tradición crítica judía en Europa) y que ponen al día la geopolítica del ser y del saber.