He aquí la narración de la restauración del cielo raso y pinjantes de algunas salas del Museo José Luis Bello y González, en la ciudad de Puebla.
Mediante crónica e imágenes se advierte el proceso de restauración que culminó, y completó, una obra que en su origen fue pensada trabajada con esos ornamentos, ahora casi olvidados por la arquitectura.
Y en ello, tanto la minuciosidad como el esmero hacia lo bien terminado, reflejan el sentir de que salvaguardar significa hallar presencia del pretérito en nuestros días.