Este trabajo presenta un análisis histórico y antropológico de las formas de gobierno local entre los huicholes y su modificación a partir de la incorporación de nuevas estructuras políticas, impuestas sobre sus jerarquías tradicionales, aspecto que se liga con la discusión respecto a las formas de gobierno indígena y su relación con el Estado mexicano. A partir del ejemplo de Guadalupe Ocotán se analiza cómo, a través de una lógica étnica, se reorganizan los símbolos comunitarios para dar coherencia y legitimar las modificaciones introducidas en su territorio, así como sus formas de organización política y ceremonial a lo largo de la historia, lo que determina sus diferencias y singularidades respecto a otras comunidades con las que comparte una tradición cultural, pero también sus formas particulares de integrarse al contexto nacional. La historia de esta comunidad es resultado de una serie de transformaciones a lo largo del tiempo; una de las principales es la reinterpretación de las jerarquías cívico-religiosas, que comenzó en el siglo XIX y se acentuó a lo largo del siglo XX. En este sentido se muestra la importancia de la comunidad como fundamento de la identidad de las sociedades indígeno-campesinas, aglutinadas alrededor de un territorio y una organización político-ceremonial específica.